Opinión

Un paseo por el desierto de Tabernas: lección de geología / Por Pepo Paz

Urbanitas en el Desierto de Tabernas - Foto Pepo Paz
photo_camera Urbanitas en el Desierto de Tabernas - Foto Pepo Paz

El desierto de Tabernas no sólo es uno de los escenarios cinematográficos preferidos por grandes directores internacionales: es también uno de los mejores escenarios naturales para comprender el pasado de nuestro planeta. Centenares de miles de años atrás fue un lecho marino y ahora nos muestra, como un libro abierto, la evolución geológica del planeta.

Huele a puente festivo a la vuelta de la esquina y es posible que muchos anden pensando todavía qué hacer. Por si eres de los que han dejado para el último momento la decisión de dónde viajar, aquí va una propuesta diferente, didáctica y divertida. Sirve también para los que no tengan claro el destino para la próxima Semana Santa: Almería y su desierto de Tabernas ofrecen una interesante alternativa a los tradicionales destinos de sol y playa.

 

Hace unas semanas, mientras preparaba uno de mis últimos trabajos publicados en la revista DeViajes, un turismo rural en Almería, tuve la ocasión de recorrer en 4x4 una de las ramblas del desierto de Tabernas en compañía de un amigo de correrías gaditano, Antonio Barce. La ruta la organiza la empresa Malcamino’s: Cristina y Placido, parisina y almeriense, gestionan el Centro de Visitantes de Las Amoladeras, una de las puertas de entrada al Parque Natural del Cabo de Gata-Níjar y han dedicado muchos meses de exhaustivo trabajo e investigación para elaborar una guía (panelizada sobre el terreno) donde se sitúan muchos de los escenarios elegidos por los directores cinematográficos para rodar algunas de las escenas de sus largometrajes desde mediados de la década de los cincuenta del siglo pasado. De los clásicos westerns a películas como la saga de Indiana Jones o Millenium.

 

 

Para ilustrar el recorrido utilizan diversos materiales, desde fotogramas hasta un reproductor de dvd donde visualizar algunas de esas escenas. Un juego de reconocimientos y de agudeza visual. Una prueba para nuestros conocimientos de cine… ¡y de geología!

 

Porque la ruta es, sobre todo, un paseo por ese fondo marino que era buena parte del territorio peninsular hace millones de años. Un repaso a las diferentes formaciones geológicas que atraen todavía hoy a los estudiosos y un libro abierto ante el que asombrarse y calibrar conocimientos. Se aprende también mucho sobre las maneras en que las diversas poblaciones que han habitado el desierto a lo largo de los siglos han ido aprovechando sus recursos y, sobre todo, se tiene la oportunidad de disfrutar de unos paisajes casi inéditos (ya que el acceso al interior de las ramblas en cualquier vehículo está regulado y muy vigilado).

 

Y si uno se queda con ganas de más tiene una opción todavía más aventurera: los recorridos subterráneos por el Karst en Yesos de Sorbas que organiza la empresa Natur Sport Sorbas. A sólo veinte minutos en coche de Tabernas.